El antes y el después de Avatar

El otro día escuché a un conocido comunicador radiofónico mencionar que en la actualidad la humanidad se dividía en dos bandos: los que habían visto la película 'Avatar' en 3D, y los que no la habían visto. Siendo yo de los cinéfilos no demasiado exigentes (aunque como todos tengo mis preferencias), tras varios intentos frustrados me hice con unas entradas, me puse mis gafas 'fassion' y conseguí desmarcarme del bando profano. Mi primera impresión fue de sorpresa contenida (por la tridimensionalidad), seguida de semiencantamiento (por los intramundos de Pandora), acentuada por la retrofamiliaridad (una pizca de Alien, otra de Matrix y un aliñiamiento de Pequeño Gran Hombre y un hombre llamado Caballo), y rematado, eso sí, por una impecable y fantástica realización técnica.

A priori no detecte ningún fallo, aunque a mi retina le fue imposible engullir tanta cantidad de planos por segundo. No conseguí detenerme a gozar de ello ni un instante y, a pesar de todo, disfruté como nunca. Falta de costumbre. Una 'peli' actual, con todos los ingredientes, me dije. Con trasfondo ecologista, estereotipo de mujer guerrera, acción a tope, minusvalía somática, historia de amor anatural con desdoblamiento de personalidad y mucho espectáculo. Lo mejor, la espectacularidad de cada plano y el no conseguir apreciar diferencia alguna entre los personajes de carne y hueso y los realizados a base de ordenador.

Como dice Jake Sully, el marine parapléjico, en una escena de la película, "¿cuál de los dos es el mundo real?". Y es que, técnicamente hablando, no sólo es la mejor película en tres dimensiones que se podrá ver hasta ahora, sino que posee los mejores efectos visuales de su tiempo. James Cameron nos muestra desde un relato clásico de aventuras fantásticas a una ingenua fábula ecológica, desde la patente ancestralidad de las redes sociales hasta el mito del Héroe, con permanentes referencias religiosas, con iconos de la actualidad como el imperialismo o la mismísima biodiversidad.

Me imagino lo diferente que hubieran sido las sagas de Star Wars, Matrix o el Señor de los Anillos en 3D. Con Jake Sully, Neytiri y los na'vi, la doctora Grace Augustine y el Coronel Quaritch, se abre una época que puede revolucionar el cine y algo más. No en vano el 31 de enero de 2010 'Avatar' se convirtió en la primera película en romper la barrera de 2.000 millones de dólares en recaudación, convirtiéndose oficialmente en la película más taquillera de la historia. De todas los titulares de la crítica, me quedo con el de Sebastián Núñez: "Un relato fantástico y épico que crea un mundo arcaico y mítico a través del cual se mira y analiza, críticamente, la civilización occidental moderna".